¿Te has preguntado alguna vez por qué algunas empresas les va bien mientras que otras se tambalean y eventualmente fracasan? La respuesta puede estar en un simple, pero poderoso concepto: la identificación clara del problema que el negocio intenta resolver para un segmento escogido de clientes potenciales. Esta habilidad de definir con precisión el problema que tu producto o servicio soluciona puede marcar la diferencia entre el éxito y el fracaso en el mundo empresarial actual.

Definir claramente el problema que tu negocio intenta resolver es más que un simple ejercicio de marketing. Es la base sobre la cual construyes todo tu negocio. He aquí algunas recomendaciones para definir el problema que tus clientes esperarían que tu producto o servicio (en definitiva tu marca) le resolviera:

  • Antes que todo desapego. Olvídate por un momento de tu producto/servicio y todo lo maravilloso que es (no digo que sea fácil) y ponte en los zapatos de tu cliente. Piensa en cuál es su problema, comprende sus frustraciones, dolores o necesidades. Así, identificar el problema central te servirá de guía para presentar tu solución de una manera que resuene profundamente con ellos y te ayudará a crear una conexión emocional con tus clientes potenciales.
  • Focalízate en ese problema principal. No intentes curar todos los males. Definir claramente el problema te permitirá enfocar tus recursos y esfuerzos en el desarrollo de una solución precisa y efectiva. Además evitará que desperdicies tu tiempo y dinero en características o servicios innecesarios que no resuelven el problema principal.

  • Llega al fondo del problema. Porque si solo resuelves los «síntomas», corres el riesgo de que aparezcan otras soluciones que hagan que la tuya sea irrelevante.
  • Sé majadero para comunicar por qué tu producto o servicio es la solución definitiva para ese problema específico. En el «océano rojo» de un mercado saturado en el que seguramente estás inmerso, la capacidad de identificar, abordar y comunicar un problema único te diferenciará de la competencia y aumentará el atractivo de tu marca al entregar una propuesta de valor única y relevante para tus clientes potenciales.
  • Sé claro en tu comunicación. Cuando los clientes perciban claramente el valor de tu oferta al resolver un problema que enfrentan, estarán mucho más dispuestos a invertir en ella. Esto se traducirá en mayores conversiones y lealtad a la marca a largo plazo.
  • Conoce a tu cliente. Al comprender el problema que estás resolviendo, estás mejor equipado para recibir y utilizar el feedback de tus clientes de manera significativa. Este feedback te ayuda a refinar y mejorar continuamente tu producto o servicio para satisfacer mejor las necesidades cambiantes de tus clientes.

Ejemplo de la formulación de un Problema, para ello utilizaremos el caso ficticio de una app llamada Citaonline que permite obtener citas médicas:

Correcta

En Latinoamérica, una gran parte de la población tiene grandes dificultades para agendar sus citas médicas, lo que deriva en pérdidas, atrasos y re programaciones a largo plazo. Además del aumento de costos para el estado, todo esto tiene como consecuencia complicaciones y agravamiento de las condiciones de salud, incluso muchos casos de personas que mueren sin ser atendidas.

Incorrecta

En Latinoamérica, las personas tienen muchos problemas para obtener sus citas médicas, por eso andan buscando soluciones digitales como Citaonline, ya que su interfaz amigable y apoyada por IA, les permite agendar sus citas de manera rápida con su doctor general o de especialidades. Por eso Citaonline es la mejor solución para pacientes que necesitan agendar su cita médica.

Desde la creación de productos hasta la estrategia de marketing y servicio al cliente, todo se basa en comprender y abordar ese problema central. Entonces, si ahora estás en la fase de desarrollo es «el momento» para definir el problema y si tu negocio está en expansión siempre hay oportunidad para hacer un stop y replantearse esta cuestión estratégica. No subestimes la importancia de identificar con claridad cuál es el problema que estás resolviendo. Es la clave para el éxito empresarial en el competitivo mundo actual.

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